Madres se oponen a la deportacion de sus hijos

Desde entonces luchan en tribunales por su permanencia en los Estados Unidos. Sucesivos fallos del juez les han sido adversos.La historia de Ana Corea es similar. A su hijo Johari, hoy de 17 años, se le ha establecido ya una fecha específica para que abandone el país.“¿Quién me asegura que mi hijo estará bien en El Salvador?

Allá no hay quien vea por él y la situación que se vive en el país, nada permite suponer que estará mejor que aquí”, replica Ana.Ana Corea es miembro de la Asociación de Organizaciones Comunitarias por un Cambio Ahora (ACORN, por su siglas en inglés). El 10 de mayo, acompañadas por más miembros de ACORN, Ana, Olinda y sus hijos se manifestaron frente al edificio de inmigración, en el centro de San Francisco. Demandaron justicia, sentido común, sensibilidad. Reprocharon la prevalencia de una política migratoria que no repara en la dignidad humana y que no reconoce la inocultable aportación de los inmigrantes a los Estados Unidos.“ACORN cree que las familias inmmigrantes que viven, trabajan y pagan fuertes impuestos, necesitan un camino legal a la ciudadanía – esta es la forma Americana de hacer las cosas,’’ dijo Corea.ACORN hace un llamado a los legisladores y al gobierno federal a que apoyen una reforma migratoria integral que proveería una ruta legal a los inmigrantes que trabajan y pagan impuestos a los Estados Unidos. Familias que han sido directamente impactadas por la falta de reformas migratorias serán aún mayormente afectadas si la ley HR 4437 es promulgadada por el Senado.

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